El gran fallo de las artes marciales en Occidente

Hiro, un gran amigo nos ha dejado esta pequeña reflexión acerca de las artes marciales en Occidente, os va a resultar gratificante leerlo, un saludo.

EL GRAN FALLO DE LAS ARTES MARCIALES EN OCCIDENTE

Para nada me considero ni siquiera un estudiante avanzado en algún arte marcial de las que practico, y tampoco me interesa alimentar mi ego como a una vaca para que engorde cuanto antes y eso me haga sentir feliz. Es más, incluso si algún día llegara a ser “sifu” de algo tampoco me consideraría como tal: Seguiría mirándome como un simple estudiante que necesita más entrenamiento físico y mental.

¿Y todo esto para qué? Porque en algo tan simple radica todo el fallo de las artes marciales traídas de Oriente a nuestro mundo occidental.

El Ego

Este es el mayor enemigo de cualquier persona, haga lo que haga. Mucho se ha escrito en la filosofía en Oriente pero también en Occidente, solo que aquí no han sabido explicarnos ese concepto (sí que han sabido soltarnos parrafadas infumables de cosas de las que ya ni nos acordamos, y cuando tocaba explicar esto, sencillamente ni ellos entendían qué era el ego, así que lo explicaban MAL)

El ego es como una vaca a la que alimentas y alimentas para comértela, pero un día se te va tanto la mano, y la vaca acaba siendo pura grasa, y no vale ni como comida para los perros. Pues en eso se convierten las personas desgraciadamente, día tras día, porque nadie les ha enseñado lo que es el ego ni de lo que es capaz. Pero peor aun es cuando ves que tu supuesto maestro (sifu, sensei), como queráis llamarlo, alguien a quien admirabas, alguien que era tu ejemplo y tu querías ser como el, de golpe, le descubres el plumero y ves que solo es ego, que se ha transformado en una vaca horrenda y lo malo del ego es que no te deja aprender ni te deja enseñar bien a tus alumnos, con las consecuencias que eso conlleva.

Consecuencias

A día de hoy veo que no paran de salir nuevos estilos de un estilo anterior o como empiezan a salir ramas de un arte marcial. Hoy entrenando me decía un hombre, PERO SI ES QUE TODO ESO QUE HACES NO VALE PARA NADA, QUE YA LO DICE MI MAESTRO QUE LLEVA 30 AÑOS EN ESTO. Cualquiera que diga 30 años no lo llamaría maestro sino GRANDÍSIMO Y ÚNICO MAESTRO DE TODOS LOS QUE PISAN LA TIERRA!!!! Pues bien, yo solo tuve que hacer lo que sé hacer para dejar en evidencia tal afirmación y estaría dispuesto, de nuevo, a hacer lo mismo con aquel que osara soltar semejante parida. Pues bien, el maestro resulta ser el “creador” de un estilo que no es ni más ni menos que lo mismo que el estilo en el que él mismo se formó.

El problema no es que no paren de salir estilos, el problema es que a esa gran mayoría de estilos les falta un CONCEPTO, un FUNDAMENTO, una ESTRATEGIA, una razón de ser en definitiva. Confundimos nuevo estilo con una empanada mental o con el estilo propio que a una determinada persona se le adapta bien a su forma de entrenar y lo llama estilo. Lo peor de todo esto es que encima esos estilos son rematadamente IGUALES al estilo del que han salido. Por poneros un ejemplo ahí tenéis la infinidad de estilos nuevos que salen de defensa personal y al final todos son, en su gran mayoría, iguales (mismos desarmes, mismas reducciones, etc.)

El por qué de esa explosión de estilos nuevos es diversa: ganarse la vida porque no se te ocurre otra cosa, haber probado su eficacia realmente en situaciones de alto riesgo y el ego. Éste último es el más frecuente y es el que acompaña a tantos “maestros” que han abandonado su arte marcial para montarse uno nuevo, igual al anterior, pero de distinto nombre, porque un buen día se pillaron un mosqueo con su anterior maestro o porque dijeron YO SOY MEJOR QUE ESE VIEJO. Estoy harto, día tras día, de ver lo mismo en las artes marciales, y esa actitud automáticamente es pasada a los alumnos que tienes a tu cargo aunque no los entrenes personalmente, se les lava el cerebro con que el estilo es perfecto y serán invencibles y al final pasa lo que pasa, que te las comes un buen día con suerte de que todo acabe ahí porque como persona, desde luego, a cargo de esos personajes, nunca podrás llegar a entender la inmensidad y complejidad del mundo interior que las artes marciales te dejan ver.

¿Y por qué no?

En absoluto digo que un arte marcial no tenga que evolucionar, es más, estoy totalmente a favor de la idea de Bruce Lee, no como mucha gente que lo adora y por la espalda se ríe de el porque claro, como está muerto… El problema de muchos es que no entendieron su mensaje y es muy simple: coge lo que te interesa y deja lo demás. Pero es que para llegar a ese punto tienes que practicar mucho tanto en intensidad como en tiempo para ver todo el amplio espectro de posibilidades y ser capaz de escoger lo que más te interesa o se adapta a ti. En mi caso no me aferro a un solo estilo, practico uno mucho, pero he practicado y sigo practicando otros que no tienen nada que ver con el. Y no pongo a parir a ningún estilo en concreto: Si una persona tiene la osadía de que tras 10 años de práctica dice de hacer un nuevo estilo, es que tiene un auténtico problema por dentro.

La creación de un estilo nuevo conlleva, como digo, no solo entrenar y entrenar sino PONER EN PRÁCTICA TU TEORÍA si quieres convertirla en un estilo practicable por todo el mundo. ¿Cuánta de esta gente que genera estilos milagreros ha puesto en práctica todo eso en un combate a muerte? Se ríen de otros estilos, a veces del que ellos provienen, estilos que llevan vigentes 300, 500 o 1000 años… ¿A caso la gente que ha pasado por ellos no los habrá probado en situaciones peores de las que nosotros vivimos hoy día? ¿Cómo es que el ego de esta gente es tan sumamente grande como para hacer estos abortos? Y además, si os fijáis, la gran mayoría de estilos base tienen una estrategia: kárate, un golpe-una vida, Wing Chun, pegarte al contrario y no dejarle golpear mientras tu le golpeas, JiuJitsu, hacer que el contrario se agote en el suelo y tu no, de manera que rematarlo sea fácil.

Pues bien, haceros esta pregunta si algún día queréis entrar en un arte marcial nuevo; ¿cuál es su estrategia? ¿Ha sido probado en combate real? ¿Tiene una vía filosófica? En Japón, si bien es cierto que salieron hasta 200 estilos de kárate, y en China otros tantos de Kung Fu, también es cierto que muchos de esos estilos fueron probados de verdad y más de uno murió por el camino además de que eran tiempos y lugares donde las artes marciales se entrenaban y se siguen entrenando de manera totalmente distinta a como aquí y con una profundidad y un estudio que aquí no alcanzamos ni de coña. Así que sería un buen comienzo que antes de meteros a un sitio nuevo os hagáis las preguntas de antes.

Claro, aquí viene otro problema muy gordo, ¿cuántos de estos nuevos maestros llegaron a entender los principios básicos de su estilo anterior? Pues os diré que estoy muy sorprendido, pero estoy harto de ver que casi todos no entendieron de la misa ni la mitad, y muchos llevan años y años practicando pero no han captado los fundamentos, tal vez porque no han tenido la paciencia de pararse a pensar en vez de pararse a pensar como hostiar al contrario y alimentar el ego de SOY MEJOR. En algo tan simple como las formas o los katas se resume todo un mundo interior y exterior, hay técnicas que no son para ser usadas en combate, NO, son solo técnicas para que entiendas un concepto que luego aplicarás a técnicas útiles o sencillamente a tu forma de pelear, y más aun, de vivir. Porque la vida ya de por sí es una pelea continua.

Un ejemplo de hasta donde llega el ego por estas tierras es ver como determinados personajes son capaces de soltar en público que los katas no valen para nada. Eso solo demuestra que o les interesa vender su estilo o, como yo pienso, que hay un componente más profundo y es que han sido incapaces de entender la esencia de las artes marciales y su mundo interior.

Resumiendo

En Occidente no somos capaces por naturaleza de entender las artes marciales como en Oriente tampoco lo son de entender la música como nosotros. Son cuestiones culturales, distintas religiones, diferentes filosofías. Mientras que en China hay una historia de 5000 años, aquí apenas llegamos a 2000. Mientras que en Oriente la vida se mira mucho más hacia la comunidad, aquí reina el individualismo. Mientras que allí tienen religiones y vías filosóficas más enfocadas al colectivo aquí es al contrario, al menos, tal y como se han enseñado. Sencillamente en Oriente no hay mucho lugar para el ego en general, se respetan las tradiciones, se respeta lo creado por gente durante cientos de años que ha peleado y probado esos sistemas en situaciones realmente peligrosas. Ellos tienen cualidades que deberíamos aprender, empezando por la paciencia y la humildad, ambas dos para aprender y estudiar bien y luego, pasado el tiempo, decidir el camino, pero sin esa base, no hay mucho que hacer. Sencillamente son más viejos que nosotros y como un abuelo que mira a su nieto con tanta hiperactividad ellos también dicen: ya aprenderán y si no, me da igual que total, pa´ lo que me queda en el convento…



Firmado: HIRO.